Al abordar estos problemas, la filosofía se distingue del misticismo, la metodología y ciertas formas de religión por su enfas_ en los argumentos racionales y de la ciencia experimental por que generalmente lleva adelante sus investigaciones de una manera empírica, sea mediante la especulación, el análisis conceptual, los experimentos mentales u otros métodos a priori, sin excluir _ reflexión sobre datos empíricos o sobre __ experiencias psicológicas.
La tradición filosófica occidental comienza en la antigua Grecia y se desarrolló principalmente en occidente. El término filosófico es originario de occidente y su creación ha sido atribuida al pensador griego Pitágoras, su popularización se debe en gran parte a los trabajos Platón y Aristóteles. En sus diálogos, Platón contrapuso a los filósofos contas sofistas: Los filósofos eran quienes se dedicaban a buscar la verdad, mientras que los sofistas eran quienes arrogantemente afirmaban poseerlas, ocultando su ignorancia detrás de juego retóricos o adulación convenciendo a otros de algo infundado o falso, y cobrando además por enseñar a hacer lo mismo. Aristóteles, por su parte, adoptó esta distinción de su maestro extendiéndola junto con su obra a toda la tradición occidental posterior.
Filosofar: Es pensar lógica y sistemáticamente.
Hacer filosofía es pensar sobre:
Introducción: Ámbito de la Filosofía
La vida de los seres humanos se realiza y se construye en las múltiples relaciones que tiene lugar en el contexto de la naturaleza y de la sociedad en la cultura. La naturaleza (orgánica e inorgánica) el contexto socio cultural histórico son las bases sobre las cuales los seres humanos dan sostenibilidad y viabilidad a su existencia concreta y material. La actividad humana o práctica social (el trabajo o conocimiento, o saberes, la práctica constituye los mecanismos o recursos fundamentales que garantiza la sobre vivencia y éxito y las relaciones de los seres humanos con su entorno.
Se debe advertir el peligro, las amenazas, los lugares donde están los recursos para consumir o producir alimentos o para protegerse de la intemperie, protegerse de lo ignoto o lo desconocido, etc. Para esto se generan saberes informaciones conocimientos como mecanismos de garantía y sobre vivencias en el medio.
En esa relación esencial de los humanos con su contexto tanto natural como cultural y social se han generado a través de la historia diversas formas de saberes: El mito, la religión, la filosofía, la ciencia, tecnológica, las creencias. Con estos saberes se procura comprender explicar y dar sentido al mundo y a la realidad objetiva (Es la totalidad constituida por la naturaleza, sociedad y el pensamiento). En el caso del saber de la filosofía se trata de una comprensión y explicación que se hace de manera racional, lógica, objetiva, sistemática, etc. De esta manera la filosofía trasciende al __ ya que este se acerca al mundo de manera irracional, desproporcionada, subjetiva y mágica.
Cuando no hay filosofía no hay ciencia.
Tarea:
Investigar
Sócrates: Creó el método mayéutica: Es un método a base de preguntas y respuestas.
- No dejó nada escrito. Conocemos sus pensamientos a través de Platón su discípulo. Es uno de los personajes en varios de los diálogos de su discípulo.
El acercamiento filosófico al mundo se realiza a través, de dos recursos técnicos metodológicos fundamentales: Las categorías filosóficas y las leyes dinámica interna de los proceso de la realidad objetiva. En el caso de las categorías se refieren a conceptos muy generales que recogen aspectos caracteres, esenciales de los fenómenos de los procesos del mundo objetivo. Aristóteles propone en su filosofía diez categorías colocando la categoría de sustancia como un principio único y fundamental que da __ de la unidad de la diversidad de procesos y objetos fenómenos de los hechos de las cosas y realidad objetiva. Las otras categorías de Aristóteles son las siguientes: Cantidad, cualidad, relación, lugar, tiempo, condición, acción, pasión, situación.
Por otro lado la filosofía contemporánea __ fuerza y enriquece las categorías propuesta; Aristóteles proponiendo el siguiente grupo de categoría: Materia, lo singular, lo práctico, lo universal, fenómeno, esencia, el contenido, la forma, la causa, el efecto, la necesidad, causalidad, casualidad, lo lógico, histórico.
Por otro lado las leyes universales, que son propia del ámbito de la Filosofía constituye un instrumento excelente para dar cuenta de la dinámica interna de la realidad y comprenderla no sólo en su existencia objetiva; sino en su dinámica pro-cesual. Las leyes reflejan siempre dinámica constantes necesaria y permanente de la realidad, unas actúan en ámbito muy limitados de la realidad (leyes generales), otras actúan en todos los niveles de la realidad objetiva (leyes universales). Estas leyes últimas son propias de la filosofía y las dos primeras propias de la ciencia. Dentro de las leyes universales tenemos las siguientes:
Tarea
Categorías:
1. Investigar categorías y conceptos.
a. Práctica Social: La práctica social del hombre no se reduce a su actividad en la producción, sino que tiene muchas otras formas: la lucha de clases, la vida política, las actividades científicas y artísticas; en resumen, el hombre como ser social, participa en todos los dominios de la vida práctica de la sociedad. Por lo tanto, va conociendo en diverso grado las diferentes relaciones entre los hombres no sólo a través d la vida material, sino también a través de la vida política y la vida cultural (ambas estrechamente ligadas a la vida material). De estas otras formas de la práctica social, la lucha de clases en sus diversas manifestaciones ejerce, en particular, una influencia profunda sobre el desarrollo del conocimiento humano. En la sociedad de clases, cada persona existe como miembro de una determinada clase, y todas las ideas, sin excepción, llevan su sello de clase.
Realidad Objetiva: La objetividad es la cualidad de lo objetivo, de tal forma que es perteneciente o relativo al objeto en sí mismo, con independencia de la propia manera de pensar o de sentir (o de las condiciones de observación) que pueda tener cualquier sujeto que lo observe o considere.
Por la definición antedicha, la objetividad es un desiderátum en cuanto es tratada siempre por sujetos, sin embargo existen claros criterios que hacen en mayor grado objetivo o no el discurso sobre algo o alguien.
La Sociedad: Es el conjunto de individuos que interaccionan entre sí y comparten ciertos culturales esenciales, cooperando para alcanzar metas comunes.
Relaciones: La cultura es el conjunto de todas las formas, los modelos o los patrones, explícitos o implícitos, a través de los cuales una sociedad se manifiesta. El conjunto de interacciones que mantienen los individuos dentro de una sociedad es conocido como relaciones humanas. Estas se basan en los vínculos, muchas veces jerárquicos, que existen entre las personas y que se dan a través de la comunicación (que puede ser visual, lingüística, etc.).
Pensamiento: El pensamiento es la actividad y creación de la mente; dícese de todo aquello que es traído a existencia mediante la actividad del intelecto.
Creencia: Una creencia es el estado de la mente en el que un individuo tiene como verdadero el conocimiento o la experiencia que tiene acerca de un suceso o cosa; cuando se objetiva, el contenido de la creencia contiene una proposición lógica, y puede expresarse mediante un enunciado lingüístico como afirmación.
El hombre pensador
El búho
Representa inteligencia
El saber mitológico está basado en relatos legendarios que se transmiten de generación en generación, sin alteraciones incluso con idénticas palabras.
La filosofía no es un relato legendario, inmuta etnocéntrico: La filosofía es un relato crítico que a lo largo del tiempo, se depura y corrige, en ___ de nuevas reflexiones.
El mito surgió, como surge la filosofía de una necesidad de explicación; pero el mito es un ___ pre-filosófico que identifica las fuerzas naturales con fuerzas vivas e intencionales.
La filosofía surge cuando el hombre llega a cubrir que las fuerzas naturales (los fenómenos de la naturaleza) tienen explicación racional sí mismas y que adicionalmente, subsiste la necesidad de explicar racionalmente otros segmentos de la realidad.
Ahí nace la filosofía; ella pretende explicar profanidad, la esencia del mundo no los fenómenos únicamente, para conseguirlo.
No ocurre a fuerzas exteriores a la naturaleza como el mito.
No recurre al criterio de creencia, sino al de conocimiento bien fundado cionalmente: Una ___ filosófica es mejor si está mejor ___ si la cree mayor número de personas.
En las grandes teologías religiosas, como la cristianas, se entre mezclan muchos elementos filosóficos; pero la filosofía es independiente y autónoma respecto a la religión.
Tanto la religión, en lo que tiene de saber, como la filosofía pretenden ser saberes universales. Pero la filosofía reclama la autonomía del pensamiento humano y la religión no. La filosofía es racional y crítica; la religión n es dogmática y hermenéutica.
La Filosofía y Ciencia
Ciencia y Filosofía, que al principio era una misma casa porque surgían de la misma inquietud por hallar respuestas fundamentadas solo en la capacidad de la razón, pues formaban parte de un mismo impulso racional, se fueron separando y se siguen separando progresivamente. Sin embargo, esta aparente oposición y distanciamiento entre ciencia y filosofía no ha hecho disminuir el número de filósofo. La filosofía continúa buscando explicar todas aquellas preguntas de la ciencia no pueden contestar porque están fuera de su campo de conocimiento.
¿Qué es la filosofía?
Estamos acostumbrados históricamente a definir la filosofía por su etimología. Así afirmamos que el término proviene del griego antiguo ___, y de su equivalente latino philosophia, vocablos que se traducen al castellano como amor por la sabiduría.
Platón subraya en sus obras de la madurez, específicamente en El banquete, que al ser la filosofía amor o aspiración a la sabiduría, implícitamente se reconoce que no poseemos la sabiduría y es por ello que quien aspira a alcanzarla de alguna manera ha de llamarse filósofo y no sabio, pues la sabiduría es atributo de los dioses.
El hecho de que la filosofía se haya presentado desde sus comienzos como una síntesis lograda por la cultura helénica para interrogar en torno al ser del mundo y a su posible planimetría, al sentido del ser y de nuestra condición, a la esencia de las cosas, de las obras y actuaciones, y de los utensilios elaborados por los seres humanos – constituye un acontecimiento fundamental que está en la base del desarrollo de la cultura occidental.
La filosofía abre histórica un espacio de intercambio racional donde van a moverse y definirse las fuerzas predominantes de esta compleja constelación cultural. Este ámbito se caracteriza por privilegiar la vía racional que se cumple mediante el diálogo en un encuentro público y sosegado, como el medio ideal para descubrir la verdad del ser, orientarnos en el mundo y asegurar, en este, nuestra posición.
Esta situación se configura según comenta Nietzsche, que era filósofo y doctor conocedor de los fundamentos de la cultura helénica a causa de que: “Los griegos, en tanto que pueblo verdaderamente sano, legitimaron de una vez por todas la filosofía por el simple hecho de que filosofaron; y, precisamente, lo legitimaron de una vez por todas la filosofía por el simple hecho de que filosofaron; y, precisamente, lo hicieron con mayor intensidad que todos los demás pueblos. […] Por el hecho de no saberla abandonar a su debido tiempo, ellos mismos fueron los causantes de la mengua de su mérito sobre el mundo bárbaro […]”.
Ahora, si consultamos el diccionario oficial de nuestra lengua castellana, esta actividad viene defijnida en su primera acepción como el “conjunto de saberes que busca establecer, de manera racional, los principios más generales que organizan y orientan el conocimiento de la realidad, así como el sentido del obrar humano”. Esta definición abarca lo que caracteriza a la filosofía si es considerada en sentido histórico.
Empero, si no quisiéramos quedarnos ahí, y cuestionamos un sitio al que acude cada día mucha gente para adquirir una visión primeriza y epidérmica de las cosas que nos interesan cotidianamente, si preguntáramos sobe la filosofía en la enciclopedia de la Web, en Wikipedia, encontraríamos que este saber viene definido como “el estudio de una variedad de problemas fundamentales acerca de cuestiones como la existencia, en conocimiento, la verdad, la moral, la belleza, la mente y el lenguaje”, explicación que en cierta manera compagina con la definición de la Real Academia Española, auque resalta el universo de los problemas antes que enfatizar en la codificación de sus descubrimientos o principios.
Si buscáramos aún otra definición, podríamos avanzar la descripción metafórica que de la filosofía ofrecen dos pensadores contemporáneos. Gilles Deleuze y Felix Guattari, en su estimulante libro ¿Qué es la filosofía? Ambos definen, no la filosofía sino el ejercicio del pensar, el filosofar, como “la relación que se produce entre la tierra y el territorio”.
¿A qué ámbito se refieren con semejante metaforización sobre los elementos que concurren en el filosofar? A mi juicio, intentan enfatizar que en el pensar filosófico, tal como se concibe hoy, no podremos contar con encontrar alguna facticidad primigenia, que podamos considerar como el fundamento originario del mundo. Es decir, que no es posible arraigar alguna perspectiva del cosmos y del ser sobre algún punto firme, definido y consistente en sí mismo.
Al filósofo de hoy no lo mueve analizar sutilmente, por ejemplo, la quintaesencia del sujeto o el objeto, como lo hacía la vieja metafísica que se origina con Platón y Aristóteles y sobrevive hasta finales del siglo XIX. En cambio, se recalca concreta tal como esta se actualiza, que debe describirse desde el desplegarse del fenómeno mismo, ante que referirse a los términos extremos que casi siempre son abstracciones creadas por el análisis del filósofo.
Se trataría de considerar el hilo tensado que es la relación y no sólo los posibles términos extremos, que indican más bien el límite de la correlación. Esto quiere decir que lo que verdaderamente importante para el pensamiento filosófico contemporáneo es determinar los rangos de las relaciones de sentido, y no anclar el pensamiento en términos abstractos.
El punto de partida del filosofar hodierno es la constatación de que el principio (lo que es originario, primero, principal y predominante en algo) lo constituye la red de sentido que se teje desde los intramundano. Esto vendria a significar que tenemos conciencia de que nos encontramos en el mundo, en un universo determinado, histórico, que no podemos salir de ninguna manera de este orbe, salvo por vía de la muerte. Pero cuando esta situación límite acontece, ya no hay ni sujeto ni mundo, ni existe el problema de su relación, de su ser en el mundo.
Es por esta razón que el pensador francés Jena Baudrillard (1929-2007) explica, en uno de sus efervescentes escritos, por qué la situación en que nos encontramos podría denominarse la de “el intercambio imposible”.
La tierra y el territorio en la caracterización de Deleuze y Guattari son componentes que apuntan a zonas de indiscernibilidad, zonas que deberían ser asumidas como comarcas límites de sentido, en el contexto de procesos continuos de resignificación en el interior de un proceso semiótico abierto. Los elementos límites fungirán como términos de referencia de un específico proceso semiótico: La desterritorización (el movimiento del territorio en la tierra) y la reterritorización (de la tierra al territorio). Como muestra de estos procesos en lo que se refiere a la filosofía, los autores establecen que: “Grecia es el territorio del filósofo o la tierra de la filosofía”.
Sin embargo, quizás algún lector pudiera cuestionar ¿A qué viene tanta insistencia por ideas que más o menos están presentes como nociones corrientes sobre la filosofía en nuestra vida cotidiana?
Entonces respondo que la causa de mi insistencia es que deseo destacar que la filosofía no es un saber que nace como una planta trepadora, como hiedra rastrera o como un parásito que necesita de otro cuerpo u organismo para ser, sostenerse y prevalecer.
Quiero dejar sentado que la filosofía es un saber que originalmente se sostiene desde sus propias raíces. Es decir, que se constituye como un saber arraigado en la historia, en su propia historia.
No es posible pensar filosóficamente sin ser consciente de que este saber se origina y desarrolla en el seno de una específica y dilatada tradición, que se cristaliza y se expresa a través de una determinada terminología que ha venido elaborándose y renovándose durante los últimos 25 siglos de historia occidental.
Sin embargo, no deja de ser cierto, igualmente, lo que escribía en 1816 el gran pensador alemán Georg Wilhelm Friedrich Hegel (1770-1831), en la introducción a su Enciclopedia de las ciencias filosóficas en compendio: “La filosofía no tiene la ventaja, de la que gozan las otras ciencias, de poder presuponer sus objetos como inmediatamente donados en la representación y como ya admitidos en el punto de partida, y en el proceder sucesivo, el metodo de su conocer”.
El fundamental arraigo histórico de la filosofía en una tradición y una terminología, considerada en sentido diacrónico, no impide que, al mismo tiempo, podamos destacar su indefinición originaria considerada en sentido sincrónico. Esto quiere decir que la filosofía está siempre abierta a toda eventual posibilidad de desterritorialización y de reterritorialización, lo que revela que pertenece al ámbito de la libre actualización de la esencia de la libertad.
En el filosofar predomina la esencial apertura que otorga la preeminencia del espíritu creativo, abierto a todas las posibles dimensiones del ser, frente a la posibilidad reglamentada de toda ciencia concentrada en lo meramente factual.
A esto se refería Nietzsche cuando definía a filósofo como “un ser humano que constantemente vive, ve, oye, sospecha, espera y sueña… cosa extraordinarias”.
No obstante, también Nietzsche insiste que era el momento del despliegue del análisis filosófico prevalece la frialdad, la lejanía y la sociedad: “El hielo está cerca, la soledad es inmensa ¡más que tranquilas yacen todas las cosas en la luz! ¡Con qué liberta se respira! ¡Cuántas cosas sentimos por debajo de nosotros! La filosofía, tal como yo la he entendido y vivido hasta ahora, es vida voluntaria en el helo y en las altas montañas: búsqueda de todo lo problemático y extraño en el existir, de todo lo proscrito hasta ahora por la moral”.
Martín Heidegger, uno de los más profundos filósofos del siglo XX, comenta la aserción de Nietzsche al decir que el filósofo está, se mueve, actúa, fuera de lo ordinario. “Se coloca sobre el secreto fundamentado de la libertad, de un modo por completo autónomo, pleno y apropiado. Filosofar consiste en el extraordinario preguntar por lo que está más allá de todo orden, sobre algo que, además, está separado, fuera del orden, en cuanto rige por ser superior o fundamental sobre todo lo ordinario.
La Filosofía en la Hipermodernidad
Frente a la necesidad de abrirse a lo extraordinario que es característica esencial de la filosofía, nuestro mundo hipermodermo se muestra regido por asumir una estrecha perspectiva donde prevalece una visión ingenieril del cosmos.
Nos encontramos encerrado y gobernados por una forma de considerar que sobre todo, y a veces únicamente valora los aspectos ordinarios, utilitarios, pragmáticos del universo.
Identificamos como valioso sólo aquello que es pasible de ser manipulado o de ser insertado en estructuras sistemáticas, objetivables, cuantificables, de eficacia inmediata, que concebimos como la única forma posible del universo.
Nuestro tiempo parece concentrarse conscientemente en apagar la actitud fundamental necesaria para que pueda haber filosofía; pugna por confinarse cada día con mayor intensidad en una atmósfera cultural librada a consumirse en lo pu__
Origen de la Filosofía
Las condiciones históricas, el desarrollo económico, social y cultural, las fundaciones de las ciudades griegas, la expansión comercial, etc. Propició el intercambio de múltiples ideas y de descubrimientos estas condiciones permitieron el desarrollo de un estilo de pensamientos muy especial que rompía con las formas mitológicas y religiosas de interpretar el mundo.
Ciertamente en el lejano oriente (Chica e India) se produjeron con anterioridad profunda reflexiones filosóficas pero como parte integrada de complejo sistema religiosos. El término filosofía entre los griegos tuvo diferentes aceptaciones; se aplicaba a cualquier tipo de saber sobre los objetos de la realidad. Se decía que era filósofo: El físico, matemático, químico, astrónomo, geómetras. Era aquel que tenía conocimiento.
Igualmente filosofía se refería a ciertos tipos de sabio que querían saberlo todo o tener una visión general, y profunda de las cosas. Otra concepción del término filosofía está referida no a la posesión de la verdad y el conocimiento; sino a la aspiración, a la sabiduría, a la búsqueda del saber o de la verdad. De aquí que la filosofía signifique Ar a la filosofía Filo= Amor Sofía= Saber.
El asombro o la curiosidad frente al misterio de lo desconocido, la incertidumbre, duda, etc. Constituye los fundamentos psicológicos del origen del saber filosófico. De igual manera el enfrentamiento del hombre en situaciones límites (la muerte). Conduce de manera existencial a la reflexión filosófica. Ej.: Una persona le diagnostican alguna enfermedad y la persona decide hacer cambios cuando la vida es un fastidio el suicido es un deber.
Resumen: Característica
La reflexión filosófica manifiesta las siguientes características:
La Disciplina Filosófica
La filosofía incluye un conjunto de disciplina con la que se da cuenta de cuestiones fundamentales como la existencia, el conocimiento, la verdad, la moral, la belleza, la mente, el lenguaje, etc. Estas disciplinas son las siguientes: Ontología, metafísica, epistemología, lógica, ética, estética, axiología, hermenéutica.
Las Problemáticas Filosóficas
La historia de la filosofía registra tres problemas fundamentales abordadas por los filósofos independientemente de la época histórica, del sistema filosóficos del que se trate o de las ideología, etc.
Ley de la Unidad y Lucha de Contrarios
La "ley"[1] de la unidad y lucha de contrarios nos afirma que la existencia de uno presupone la existencia del otro y en eso radica su unidad. Bien, la carga positiva presupone la negativa, el electrón al positrón, la materia a la antimateria. Pero ¿esta unidad presupone una atracción, una cohesión, una afinidad? O simplemente dice que dado un ente en un lugar dado tiene que existir un anti-ente en cualquier parte. Si esto es así ¿por qué? ¿Porque es parte de un plan divino? El filósofo marxista declarará que no, que el camino para ese resultado es inductivo, parte de las ciencias, entonces lo que se estaría expresando en este sentido sería una característica simétrica del universo, pero ¿cuáles son los límites de esta simetría? Por ejemplo, si existe un espacio deberá existir un anti-espacio, si existe energía deberá de existir una anti-energía[2] y siguiendo el mismo proceso debería existir un "anti" de todo lo conocido o por los menos se nos debe definir con claridad la regla que se cumple en la simetría que se plantee, sobre todo si se está enunciando el asunto con fuerza de "ley" científica.
El término "lucha" es un término que nace en la biología. Si se pretende el carácter de ley universal para las leyes dialécticas se debe esclarecer qué significa "lucha" para las partículas subatómicas y el mundo físico. Sobre todo, porque en la realidad física los opuestos se atraen, las cargas positivas y las negativas se atraen, y también se atraen las masas de los seres, que son absolutamente idénticas en su naturaleza por la gravedad, las cargas sobrantes a los cuerpos que tienen menos carga. Es decir, el concepto de atracción, de fuerzas o tendencias de atracción es un concepto más general que el caso de la atracción de las cargas opuestas. Existen también fuerzas repulsivas, la repulsión, los niveles prohibidos, la exclusión. Resultaría más lógico hablar de "lucha" referente a la repulsión que con referencia a la atracción y es que como ocurre en todo el marxismo, se emplean términos que corresponden a niveles superiores de complejidad, a la vida animal, se generalizan y absolutizan como si fueran aplicables a los niveles simples físicos y el resultado que se obtiene es totalmente inadecuado. El proceso más lógico es sin duda el inverso.
Dice el marxista que los opuestos "luchan", tienden a ocupar el lugar del contrario, a aniquilarse. Por ejemplo, el positrón (que juega el papel del electrón en la anti-materia) y el electrón sufren una fuerza atractiva por sus cargas y cuando se unen se transforman emitiendo una energía, se transforman en radiación. Esta situación no es común en el universo conocido, porque como negación de la simetría del Universo (o lo que es lo mismo, de la unidad de contrarios), la anti-materia tiene muy poca presencia en el mismo. Más común sería la del protón y del electrón (que se diferencian por la cantidad de masa, es decir, son opuestas tan sólo por sus cargas) que darían lugar en su unión a un neutrón, es decir, se transforman, aumentando la masa y desapareciendo la carga. Pero el proceso inverso también existe. Es decir, dada una radiación o un neutrón es posible obtener las partículas originales. ¿Dónde se mete en estos procesos inversos la "ley" de la unidad y lucha de contrarios?
Tampoco es posible aplicar el "razonamiento" de la dialéctica marxista a los polos magnéticos. Estos polos magnéticos opuestos se atraen, pero no se transforman, tampoco resulta fácil definir como "lucha" esa situación. Por otra parte las fuerzas nucleares son capaces de mantener unidas a las cargas similares, a pesar de las fuerzas de repulsión. Se logra por lo tanto un equilibrio entre ambos tipos de fuerzas, porque la unidad no prosigue indefinidamente, no colapsa.
Decir que en la lucha de contrarios radica el motor del desarrollo es afirmar algo que no se aplica en los fundamentos mismos del Universo y es emplear un término, el término "lucha", que no tiene cabida en las partículas elementales, base de todo lo existente, y es, además, completamente parcial, porque también las fuerzas repulsivas y de exclusión[3] entre los iguales juegan un rol de primer orden en las estructuras atómicas y por ende, como ya dijimos, en la base del Universo conocido.
Ley de la unidad y lucha de los contrarios: todos los elementos de la naturaleza incluyen en su interior contradicciones, fuerzas antagónicas que dan lugar a nuevos cambios.
Ley de la negación de la negación: en términos de Hegel, tesis, antítesis y síntesis, en términos marxistas, afirmación, negación y negación de la negación. Engels cree que esta ley es válida tanto para la historia, como para el pensamiento, como para la naturaleza misma. La negación no es negación pura y simple sino asimilación de lo negado; pero en un estadio de realidad superior. Engels pone el famoso ejemplo del grano de cebada: si lo consumimos lo negamos sin más, pero si lo plantamos de él sale la planta, que es su negación, y de la planta nuevos granos (negación de la negación).
Con el materialismo dialéctico el marxismo se opone el materialismo mecanicista, para el cual las realidades superiores son meros reflejos de las inferiores y pueden ser explicadas con categorías propias de las inferiores: el materialismo dialéctico considera que hay niveles de realidad superiores, consecuencia de los inferiores pero no reductibles absolutamente a ellos (la vida, por ejemplo, al mundo inorgánico, o la conciencia a vida inconsciente). El materialismo dialéctico defiende también una concepción evolucionista del mundo natural. Marx Engels estudiaron “El origen de especies” (1859) de Darwin y creyeron que este autor era capaz de explicar la vida compleja a partir de vida más simple sin necesitar de principios teológicos.
La Problemática Ontológica – Metafísica: Procura estudiar e investigar la naturaleza de la realidad objetiva sus componentes su proceso y su dinámica. (Estudia realidad).
La Problemática Epistemológica: Reflexiona, investiga y estudia el conocimiento humano, su naturaleza, su origen, sus condiciones, su posibilidad, sus límites, etc.
La Problemática Axiológica: Reflexiona, investiga y estudia los valores dando cuenta de naturaleza de su forma de realizarse de su existencia, de su objetividad o de su subjetividad.
(Textos directos de Platón)
1. Lao -Tse
Lao-Tsé, también llamado Lao Tzu, Lao Zi, Laozi o Laocio[cita requerida] (chino simplificado y tradicional: 老子, pinyin: lǎozǐ, literalmente «Viejo Maestro»). Su nombre real era Li Er 李耳. Es una figura cuya existencia histórica se debate. Se le considera uno de los filósofos más relevantes de la civilización china. La tradición china establece que vivió en el siglo VI a. C., pero muchos eruditos modernos argumentan que puede haber vivido aproximadamente en el siglo IV a. C., durante el período de las Cien escuelas del pensamiento y los Reinos Combatientes. Se le atribuye haber escrito el Dào Dé Jing o Tao Te Ching (道德經), obra esencial del taoísmo. De acuerdo con este libro, Dao o Tao ("el Camino") puede verse como el cambio permanente y éste es la verdad universal. Dentro de las dudas sobre su existencia y la etapa histórica en la que vivió, se cree que pudo ser contemporáneo de Confucio.
Definiciones de las Características de la Filosofía
La filosofía se postula como un saber “crítico”, porque pone en “crisis”, en duda, ciertas cosas que no le parecen suficientemente claras o bien explicadas. Por ejemplo: los filósofos no están de acuerdo con los mitos. De esta manera se dice que la filosofía es desmificadora en la medida en que propone liberarnos de perjuicios o de mitos que han aparecido a lo largo de la historia. Como observa Cassirer, vemos surgir, aún en épocas recientes, una serie de mitos que es necesario combatir, como ejemplo, el mito del derecho divino de los reyes, o el mito de la superioridad de ciertas razas, que ha traído consigo la discriminación y justificación de tantas guerras y atropellos a los derechos humanos. De la misma forma, en nuestra vida cotidiana, hemos oído hablar de mitos como la virginidad, la democracia, el machismo y otros tantos.
La historia de la filosofía nos muestra cómo los filósofos no se conforman con cualquier clase de respuesta. Tan buen ejemplo, lo es Sócrates, quien buscaba intensamente la verdad y una certidumbre a toda prueba, Sócrates clavada el aguijón de la duda en la conciencia de sus conciudadanos. Esto nos da a entender que no sólo basta con discutir la filosofía, sino que hay que llegar hasta las últimas consecuencias, vivir de ello, pues la vida sin filosofar no vale la pena.
Este carácter fundamentador, quiere decir, que el filósofo desea saber en qué se basan, en qué descansan todos nuestros conocimientos.
La filosofía nos lleva a pensar sobre los fundamentos en que se asientan nuestros conceptos, conocimientos y creencias, y para esto hace una exhaustiva revisión. Dichos fundamentos se llaman “principios” o “primeros principios”. Aristóteles define la filosofía como “ciencia de los primeros principios y causas últimas a la luz natural de la razón”.
Los primeros principios son independientes de otros principios para tener validez, son principios autosuficientes, que salen por sí y para sí.
Wilheim Dilthey (1833-1911, filósofo del historicismo), nos dice, según la historia, que la filosofía tiene una tendencia a la “universalidad”. Esto significa que la filosofía no se conforma con explorar fragmentos de la realidad, ni con dar visiones parciales del mundo.
La filosofía pretende darnos una “visión total”, universal o integral de las cosas. Implicando la aspiración de desentrañar el sentido último, total de la vida y del mundo; dentro de este sentido, tratar de ubicar y explicar el ser en todas sus manifestaciones.
Pero en la medida en que avanzan más las ciencias, se hacen más complejas y se atomizan más, alejando al filósofo de su visión de ser héroe y la filosofía aventura heroica.
Caracterizando la filosofía como un conocimiento que se preocupa por encontrar el sentido, meta y valor último de la vida humana, siempre con el fin de proyectar una vida mejor; sacamos “la filosofía como sabiduría”.
La sabiduría se adquiere pacientemente, a través de una larga vida y una práctica constante de valores, actitudes, etc. La sabiduría está plenamente arraigada en la vida humana, basándose en las verdades que corresponden al corazón y que la razón ignora. Concierne entonces que la filosofía es una forma de vivir, se entiende como la adquisición de una sabiduría tal que nos permita vivir bien, con excelencia, dentro de una idea o norma de vida plenamente humana.
Se trata de problemas y soluciones que tienen profundas repercusiones en la sociedad, al grado de transformarla y causar estragos y revoluciones sin precedentes. Es entonces que la filosofía se constituye en una poderosa fuerza histórica, es un arma poderosa y terrible para demoler perjuicios y falsas concepciones, para despejar el camino y construir nuevas alternativas y mejores mundos.
El filósofo constantemente destruye el mundo para volverlo a construir en algo mejor; como en el “pensamiento marxista”, la filosofía no puede ser un instrumento solamente teórico, de conservación o justificación de la realidad, sino propiciatorio de su transformación. Cabe señalar, Marx y Engels se percataron de que para que la filosofía tuviera sentido, para que cumpliera una función realmente práctica, debía ocuparse de las necesidades de las grandes masas humanas, de los desprotegidos, así como del conocimiento científico de la naturaleza y de la sociedad.
Textos de Platón de la Problemática
1. El problema ontológico o metafísico o “¿Qué existe? La suposición básica conocida de Rene Descartes (1596-1650): “Cogito, ergo sum” pienso, luego existo” se originó de un problema largo tiempo recalcado por la teología de la Iglesia Cristina. ¿Cómo puede la “mente” conocer la “materia? O en otras palabras, ¿Cómo podemos llegar a conocer algo acerca del mundo? ¡Quizás es solamente una ficción de nuestra imaginación!... La respuesta ele Descartes fue ingeniosa y persuasiva; continúa inquietando a los filósofos y científicos ele hoy en clía. Permítaseme suponer, elijo Descartes, que nada existe en lo absoluto acerca del universo, excepto, el hecho indiscutible ele que estoy pensando, aquí y ahora, y que, debido a que estoy pensando, debe existir una entidad que realiza el pensar, esto es, yo. Más aún, debe haber una parte ele mí que conoce y una parte (más básica) que es como todo lo demás, un objeto de conocimiento. Pero inmediatamente, Descartes se vio ante un problema ulterior: ¿Qué sucede si solo yo existo, y el resto del universo existe solamente en los procesos de mi pensamiento? Descartes estaba profundamente preocupado con esta posibilidad (que de la existencia de Dios, el dudar ele la existencia del universo implicaba que Dios podría estar jugando un sudo truco de representación falsa. Es importante ciarse cuenta que el paso de “pienso, luego existo” a “el universo existe” no se da lógicamente se da solamente si se aceptan las premisas adicionales: “Dios existe y es infinitamente bueno y honrado” y “Dios me da las percepciones del mundo”. El sofista Gorgias resolvió el dilema hace algunos 2500 años: “Nada existe. Si algo existiera no podría ser conocido. Si algo pudiera ser conocido no podría ser comunicado”. El no estaba interesado particularmente en los dilemas lógicos y teológicos, y la preocupación del hombre por lo espiritual relegó el problema hasta el siglo XVII.
Aún entonces, la conclusión lógica final cíe que nada existe, excepto la mente del que percibe, fue evitada por Descartes, Leibnitz y Berkeley. Para ellos, Dios viene al rescate: si parece que el mundo está ahí, así debe ser, parafraseando a Descartes: Dios no es un embustero de confianza. El solipsismo, al negar la existencia del universo, es por tanto ateísta y a la inversa; el teísmo tradicional necesita de la consideración de que el universo es real. (Se podría argüir que el solpsismo es una forma de teísmo que podríamos llamar “autoteísmo”, lo que significa “yo soy el Dios de mi propio universo”. Pero esta variante difícilmente podría ser considerada “tradicional”). Hoy en cha, las ciencias exactas haz exorcizado en alto grado la duda última acerca de la existencia del mundo como un problema metafísico insoluble. Ninguna respuesta puede ser aprobada o rechazada.
2. Problema Epistemológico: El conocimiento xa Platón debe ser racional, evidente, a priori y mirando la razón, las ideas son las esenciad de las cosas y son conceptos universales y necesarios, hay que renunciar a lo sensible; con esta base crea dos teorías: t0 de la dialéctica y t0 de la reminiscencia.
t0 de la dialéctica: Platón en su libro la república, crea el mito de la caverna, esta consiste en que unos hombres han estado toda su vida encerrados en una caverna frente a una pared viendo únicamente las sombras reflejadas en esa pared creyéndose así que esa es la realidad, su vida es una “Doxa”., uno de ellos sale de la caverna “anábasis” y descubre el verdadero conocimiento “episteme”, más adelante cuando ya es conocedor de la verdad decide volver a la caverna a avisar a sus compañeros “catábasis” estos le condenan pensando que está loco.
La caverna, representa al mundo sensible y el mundo presentado en la teoría como verdadero corresponde al de las ideas.
t0 de la reminiscencia: Explica porque están las verdades universales en nuestro interior mediante el mito del carro alado: el alma racional vaga por el mundo de las ideas en un carro tirado x el alma irascible y x el alma concupiscible estas dos almas tiran para lados distintos así que el alma racional acaba cayendo al mundo sensible pero con el conocimiento de las ideas verdaderos pero al introducirse en un cuerpo en un cuerpo se le olvidan todo; así que lo único que tiene que hacer xa conocer, xa saber, es recordar (reminiscencia).
3. La Problemática Axiológica: En los diálogos de Platón y en su obra en la república encontramos los antecedentes de la compresión de los valores, para este célebre prensador, los valores se refieren a significaciones positivas (la idea de bien, la belleza y la utilidad).
Los filósofos presocráticos y sobre la realidad objetiva planteándose la búsqueda de principios fundamentales de todas las cosas. Procuran descubrir (el arque arye) de la realidad de todas las cosas encima de todo cambio y se refiere a la sustancia primitiva, primera y de origen material y que constituye el fundamento común de los diversos fenómenos y procesos.
Cada uno de los filósofos pre-socráticos identificó el fundamento de lo real.
Anterior a apeiron estaba la explicación nada abstracto.
En un momento de mayor desarrollo de las ciudades griegas emergen dos filósofos que con sus reflexiones van a dar inicios a dos líneas filosóficas opuestas, contradictorias y que en muchos casos confluye en un mismo sistema estos dos filósofos son: Heráclito y Parmenides.
Heráclito: Para este filósofo la esencia o fundamento de la realidad es el cambio. Todo cambia y nada permanece, el ser es en un momento y en otro momento deja de ser para convertirse en un no ser. La naturaleza es como el fuego donde se enciende y se apaga de aquí que Heráclito identifique el fuego como el fundamento de la realidad.
Este fuego es símbolo del cambio del desarrollo y la transformación. El sol el nuevo cada día pues cada día aparece lucha con la sombra.
Conceptos básicos de Heráclito en la filosofía son el fuego, cambio, tiempo, chiclo, evolución en esta concepción dinámica de la realidad caben las contradicciones, las negaciones que Heráclito se convierte en un verdadero precursor de la dialéctica.
Sin embargo; Heráclito continúa de alguna manera la tradición griega al considerar que existe un logo que transciende el cambio en medio del cambio, hay una armonía capaz de unificar el ser de la naturaleza. Es decir, a pesar del cambio todo confluye en la unidad.
Parmenides frente a la posición de Heráclito, Parmenides plantea que la verdadera realidad es el “Ser” que es estático, un __ invisible, imperecedero, eterno, increado, pleno, finito, lo verdadero.
Parmenides: Propone dos caminos por donde los filósofos pueden avanzar en el conocimiento de la realidad:
El período clásico griego corresponde a la madurez de la filosofía inglés está representando por Sócrates, Platón, Aristóteles.
Platón enfrenta los planteamientos de Heráclito y de Parmenides y a ambos planteamientos lo incluye en su teoría de las ideas. Su respuesta a la problemática ontológica se hace visible cuando sostiene que la realidad está fragmentada en dos mundos:
Suprasensible: Esta fuera de este mundo en el cielo.
Sensible: Este el que vivimos.
El mundo de las ideas es el mundo de la razón donde impera la verdad está formado por las ideas que son eternas, incrementadas, intangibles, invisibles imperecedera e inmutables. En este mundo de las ideas reside el verdadero fundamento de toda la realidad. Frente a este mundo de las ideas Platón opone el mundo de las apariencias o mundo sensible que es imperfecto, cambiante, y efímero y que es captado por lo sentido.
El mundo sensible tiene como modelo o referente el mundo perfecto de las ideas hacia donde se orienta y hacia dirige se dirige.
Entre ambos mundos existe una fuerza que empuja el mundo efímero de lo sensible al mundo perfecto y duradero de las ideas. Estas fuerzas o energía la llama Platón el amor (eras platónicas).
Heráclito
Pocas son las cosas que sabemos de la vida de Heráclito de Éfeso. Nació hacia el 544 antes de Cristo, aproximadamente, y vivió en Éfeso, ciudad enclavada en la costa Jonia, al norte de Mileto, hasta su muerte, en el 484 antes de Cristo. Pertenecía a una familia aristocrática y, al parecer, no se llevó muy bien con sus conciudadanos, si nos atenemos a alguno de los fragmentos que se conservan de su libro, y a los testimonios de sus contemporáneos.
Escribió una obra a la que se le da el título común " Sobre la naturaleza" que se le había dado también a los libros escritos por otros filósofos anteriores. No es seguro que se tratara realmente de un libro en el que se desarrollaran sistemáticamente temas relacionados con el conocimiento de la naturaleza, el alma o la cosmología. Es probable que se tratara de un conjunto de sentencias recopiladas en forma de libro, hipótesis que se apoya en el carácter enigmático y oracular de los fragmentos que conservamos, carácter que ya en su época le valió el sobrenombre de "El oscuro".
Parmenides
Parmenides nació en Elea, hacia el 540 antes de Cristo aproximadamente, donde residió hasta su muerte el año 470. Se dice que fue pitagórico y que abandonó dicha escuela para fundar la suya propia, con claros elementos anti-pitagóricos. Algunos atribuyen la fundación de la escuela de Elea a Jenófanes de Colofón, sin que haya verdadera constancia de ello, por lo que la fundación de dicha escuela ha de atribuirse a Parmenides, dejando al margen la cuestión de hasta qué punto el pensamiento de Parmenides puede estar influido por el de Jenófanes. Parmenides escribió un poema filosófico en hexámetros del que conservamos la mayoría de los versos a través de Simplicio.
En dicho poema, luego de un proemio de carácter religioso, en el que el autor realiza una serie de invocaciones para conseguir el favor de una diosa no identificada con el objeto de poder acceder al verdadero conocimiento, Parmenides nos expone su doctrina: la afirmación del ser y el rechazo del devenir, del cambio. El ser es uno, y la afirmación de la multiplicidad que implica el devenir, y el devenir mismo, no pasan de ser meras ilusiones.
El poema expone su doctrina a partir del reconocimiento de dos caminos para acceder al conocimiento: la vía de la verdad y la vía de la opinión. Sólo el primero de ellos es un camino transitable, siendo el segundo objeto de continuas contradicciones y apariencia de conocimiento.
"Ea, pues, que yo voy a contarte (y presta tu atención al relato que me oigas)
los únicos caminos de búsqueda que cabe concebir:
el uno, el de que es y no es posible que no sea,
es ruta de Persuasión, pues acompaña a la Verdad;
el otro, el de que no es y el de que es preciso que no sea,
este te aseguro que es sendero totalmente inescrutable."
La vía de la opinión parte, dice Parmenides, de la aceptación del no ser, lo cual resulta inaceptable, pues el no ser no es. Y no se puede concebir cómo la nada podría ser el punto de partida de ningún conocimiento. ("Es necesario que sea lo que cabe que se diga y se conciba. Pues hay ser, pero nada, no la hay.") Por lo demás, lo que no es, no puede ser pensado, ni siquiera "nombrado". Ni el conocimiento, ni el lenguaje permiten referirse al no ser, ya que no se puede pensar ni nombrar lo que no es. ("Y es que nunca se violará tal cosa, de forma que algo, sin ser, sea."). Para alcanzar el conocimiento sólo nos queda pues, la vía de la verdad. Esta vía está basada en la afirmación del ser: el ser es, y en la consecuente negación del no ser: el no ser no es.
"Y ya sólo la mención de una vía
queda; la de que es. Y en ella hay señales
en abundancia; que ello, como es, es ingénito e imperecedero,
entero, único, inmutable y completo."
Afirma Parmenides en estas líneas la unidad e identidad del ser. El ser es, lo uno es. La afirmación del ser se opone al cambio, al devenir, y a la multiplicidad. Frente al devenir, al cambio de la realidad que habían afirmado los filósofos jonios y los pitagóricos, Parmenides alzara su voz que habla en nombre de la razón: la afirmación de que algo cambia supone el reconocimiento de que ahora "es" algo que "no era" antes, lo que resultaría contradictorio y, por lo tanto, inaceptable. La afirmación del cambio supone la aceptación de este paso del "ser" "al "no ser" o viceversa, pero este paso es imposible, dice Parmenides, puesto que el "no ser" no es.
El ser es ingénito, pues, dice Parmenides ¿qué origen le buscarías? Si dices que procede del ser entonces no hay procedencia, puesto que ya es; y si dices que procede del "no ser" caerías en la contradicción de concebir el "no ser " como "ser", lo cual resulta inadmisible. Por la misma razón es imperecedero, ya que si dejara de ser ¿en qué se convertiría? En "no ser " es imposible, porque el no ser no es... ("así queda extinguido nacimiento y, como cosa nunca oída, destrucción").
El ser es entero, es decir no puede ser divisible, lo que excluye la multiplicidad. Para admitir la división del ser tendríamos que reconocer la existencia del vacío, es decir, del no ser, lo cual es imposible. ¿Qué separaría esas "divisiones" del ser? La nada es imposible pensarlo, pues no existe; y si fuera algún tipo de ser, entonces no habría división. La continuidad de del ser se impone necesariamente, y con ello su unidad. Igualmente, ha de ser limitado, es decir, mantenerse dentro de unos límites que lo encierran por todos lados.
El ser es inmóvil, pues, de lo visto anteriormente queda claro que no puede llegar a ser, ni perecer, ni cambiar de lugar, para lo que sería necesario afirmar la existencia del no ser, del vacío, lo cual resulta contradictorio. Tampoco puede ser mayor por una parte que por otra, ni haber más ser en una parte que en otra, por lo que Parmenides termina representándolo como una esfera en la que el ser se encuentra igualmente distribuido por doquier, permaneciendo idéntico a sí mismo.
El ser al que se refiere Parmenides es material, por lo que difícilmente puede ser considerado éste el padre del idealismo. El hecho de que Platón, posteriormente, aceptando los postulados parmenídeos, identificara a ese ser con la Idea, no debe ser extrapolado históricamente hasta el punto de llegar a afirmar que Parmenides interpretaba el ser como algo no material. La afirmación de que de el ser es Uno, finito, parece indicar claramente una concepción material del ser.
Por lo demás, la asociación de la vía de la verdad con el pensamiento racional y de la vía de la opinión con la sensación parece poder aceptarse, aunque sin llegar a la claridad de la distinción que encontramos en Platón. Efectivamente, Parmenides afirma en el poema la superioridad del conocimiento que se atiene a la reflexión de la razón, frente a la vía de la opinión que parece surgir a partir del conocimiento sensible. Pero el conocimiento sensible es un conocimiento ilusorio, apariencia. Podemos aceptar pues que Parmenides introduce la distinción entre razón y sensación, entre verdad y apariencia.
Platón
Las matemáticas son las que nos ayudan a dar un empujón hacia regiones superiores, pues no arrancan del mundo del devenir y nos introducen a la contemplación de los objetos intangibles. Pero el matemático aún pertenece atado a las representaciones sensibles (geométricas). Abandonarlas y penetrar en el mundo de las ideas será la difícil misión de todos y cada uno de los filósofos.
El mito de la caverna de Platón describe a personas encadenadas en la parte más profunda de una caverna; como dije en comienzo de este ensayo, la caverna es simbolizada por la ignorancia que nos rodea y los prisioneros son nuestras propias almas que están prisioneras en el mundo sensible.
Atados de cara al a pared, su visión está limitada y por lo tanto no pueden distinguir a nadie. Lo único que se ve es una pared delante de ellos, sobre la que se reflejan modelos o estatuas de animales y objetos que pasan delante de una gran hoguera resplandeciente. En este caso la pared, o el muro, representa a la muerte, las estatuas u objetos son el paso del estado mental de los hombres al de la realidad; que implica dolor y conversión del alma, y la hoguera o fuego, se refiere al la razón, además de ser quien posibilita que las sombras de los objetos se proyecten a la pared, a la que se ven obligados a mirar los prisioneros.
Uno de los individuos huye y sale a luz del día por una escampada subida, con ayuda del sol, esta persona ve por primera vez el mundo real y regresa a la caverna diciendo que las únicas cosas que han visto hasta ese momento son sombras y apariencias y que el mundo real les espera en el exterior, si es que quieren liberarse verdaderamente de las ataduras, de sus propias ataduras. Cuando el prisionero sale por la escampada subida, se refiere a la pura transición hacia el mundo real, el universo de la existencia plena y perfecta, a la sabiduría en su punto justo, que es objeto pleno del conocimiento; también simboliza el estado mental de los prisioneros, al igual que las sombras y las imágenes, o más simple aún es el camino hacia el mundo suprasensible.
Mundo de la realidad |
Mundo de las apariencias |
Es real y verdadero |
Es ilusorio y falso |
Reflexiona sobre el siguiente argumento:
¿EXISTE EL MOVIMIENTO? Zenón de Elea es conocido, entre otras cosas, por una famosa prueba en contra del movimiento, la carrera entre Aquiles y la tortuga. Aquiles (A), el más rápido de los hombres, corre a porfía con la tortuga (T), el más lento de los cuadrúpedos. Al arrancar A se encuentra en el punto a y para compensar la desventaja de T, ésta se encuentra en b. Para poder alcanzar a T, A debe primero llegar |
a b, pero para entonces T ya está en c. Cuando A haya llegado a c, T ya estará en d, y así seguirán indefinidamente. Por lo tanto, A no alcanzará nunca a T. a b c d Tomado de Chirstenson, Lundberg. Textos filosóficos, colec. Textos extemporáneos, “Serie Sócrates”, |
Aquiles creyó que porque el más rápido, y la tortuga más lenta por confiarse y echarse a dormir la tortuga no le podía ganar.
En que no nos podemos confiar, porque a veces creemos que porque podemos o queremos hacer algo no existe persona que nos pueda superar.
Aristóteles procura resolver el problema metafísico de la separación entre el medio de las ideas y el mundo de las apariencias. Aristóteles entiende que estos dos mundos el de la realidad y el de las __ están juntos formando una sola unidad llamada sustancia. Esta se refiere siempre a un principio único que dota de unidad a la diversidad y multiplicidad de ser o realidad objetiva. De aquí que el ser sea único y múltiple a la vez. Esencia y fenómeno están juntos.
El ser sea único y diverso a la vez. La sustancia constituye aquel componente que la realidad que integra el ámbito del cambio y de las apariencias de la realidad con el ámbito de lo permanente y de la esencia de esa misma de la realidad.
Para Platón existen dos tipos de sustancia:
Sustancia Primera: recoge los aspectos cambiantes, las apariencias, lo individual y lo concreto de la realidad.
Rosa concreta es la sustancia. Ej.: los visible.
Epifanía: Es lo que se ve, se expresa el dios visible.
Sustancia Segunda: Está referida aquel ámbito de lo real que es permanente, continuo y esencial que se expresa en las ideas, en los universales, en el género, en las especies. Ej.: Esta mesa = existe
La mesa = no existe como idea.
El movimiento
Aristóteles entiende que la realidad es una concatenación de movimiento. Define el movimiento como la actualización de la potencia o el tránsito de la potencia o de la potencia al acto.
Es una secuencia de causas y efectos que solo se detienen en el motor inmóvil que lo mueve todo; pero que nada ni nadie lo mueve a el.
Acto=soy ahora
Potencia=puede llegar a ser
Movimiento= la conversión de una pizarra a una cama o una silla
La summa teología es la obra de Santo Tomás de Aquiles.
La patriótica (Escuela fundada por San Agustín y los padre de la iglesia) desarrollan la teoría de Iluminismo y para ellos recupera la filosofía de Platón y refuerza la fe en Dios, la existencia de cielo y la fortaleza de la ciudad de Dios que es su obra.
Aristóteles
Aristóteles (en griego antiguo Ἀριστοτέλης, Aristotélēs) (384 a. C. – 322 a. C.) fue un filósofo, lógico y científico de la Antigua Grecia cuyas ideas han ejercido una enorme influencia sobre la historia intelectual de Occidente por más de dos milenios.
Aristóteles escribió cerca de 200 tratados —de los cuales sólo nos han llegado 31— sobre una enorme variedad de temas, incluyendo lógica, metafísica, filosofía de la ciencia, ética, filosofía política, estética, retórica, física, astronomía y biología. Aristóteles transformó muchas, si no todas, las áreas del conocimiento que tocó. Es reconocido como el padre fundador de la lógica y de la biología, pues si bien existen reflexiones y escritos previos sobre ambas materias, es en el trabajo de Aristóteles donde se encuentran las primeras investigaciones sistemáticas al respecto.
Entre muchas otras contribuciones, Aristóteles formuló la teoría de la generación espontánea, el principio de no contradicción, las nociones de categoría, sustancia, acto, potencia, etc. Algunas de sus ideas, que fueron novedosas para la filosofía de su tiempo, hoy forman parte del sentido común de muchas personas.
Resumen de la Pág. 19-21
Aristóteles: La lógica y los fundamentos del ser
Aristóteles a diferencia de Platón se adentrará en el interior de las cosas. Nos dirá que ella tienen consistencia en sí mismas que tienen realidad. Nos refiere al mundo de las cosas del pensamiento de Aristóteles: Fijamos la atención en dos áreas:
El pensamiento: (a) mente, la razón, la inteligencia, allí donde están las ideas. El área de las cosas, el mundo externo. Estas dos áreas dan lugar a dos partes importantes del pensamiento de este gran filósofo griego la lógica y la metafísica.
La lógica: nombre asignado por el propio Aristóteles fue organon (instrumento); bajo este ___ se agrupan un conjunto de trabajo que Aristóteles escribió sobre el “logos” que en la tradición filosófica posterior estos trabajos se conocen como la lógica.
Para él la lógica es la ciencia de la demostración.
La lógica: Se ocupa de estudiar el funcionamiento de la razón en su actividad relacionada con el conocimiento de la realidad. Estudia las normas y leyes que rigen la razón humana.
Aristóteles: Inicia estudio de la lógica con el tratado de las categorías, después estudia los conceptos, pasa al estudio de los juicios para explicar después su teoría de silogismo. Concluye con la ciencia y la demostración.
La lógica es el instrumento para la ciencia en general.
Partes estudiadas en la lógica
Categorías: modo de presentarse el ser, son nueve la primera es la sustancia, la nueve restantes son los accidentes.
Concepto: es la representación mental de una casa. El concepto es sólo una representación, no afirma ni niega nada respecto del ser o cosa a que se refiere.
Juicio: Es el resultado de la atribución de un concepto a otro (el juicio puede ser afirmativo como negativo).
Silogismo: Es un argumento en el que, establecidas ciertas cosas, resulta necesariamente de ellas, por ser lo que son.
Demostración: es un proceso mediante el cual se capta el origen de donde procede el objetivo que hemos conocido, la demostración, por tanto exige una búsque da las causas por las __ (es una cosa es lo que es).
Estudio del ser: La metafísica: Todos los hombres tiende por naturaleza a saber. Con esto frase Aristóteles inicia la obra que llamó Losofía Prima (primera) y que recibió el nombre de metafísica.
Metafísica: (Filosofía primera) estudia todas las cosas y toda la cosa punto de vista de ser.
Aristóteles usa la analogía para referir al ser.
Analogía: Un concepto se puede aplicar a distintas cosas porque se da en todas ellas la referencia común del significado de ese concepto.
El ser es análogo porque se aplica a la realidad.
Obras filosóficas y científicas de Aristóteles más importantes:
2. Filosofía en la Edad Media
Se denomina filosofía medieval a la filosofía dada en Europa y el Oriente Medio durante el período conocido como Edad Media, periodo que se extiende desde la caída del Imperio Romano de Occidente en el siglo V hasta el descubrimiento de América en el año 1492. La mezcla de elementos romanos, cristianos y germanos contribuyó la base sobre la que se formó el mundo medieval. Esta etapa histórica abarcará hasta el siglo XIV cuando el renacimiento establecerá las bases culturales para una nueva etapa la Edad Moderna.
3. Dos Grandes Escuelas Medievales
La Filosofía Escolástica nació en las catedrales, en los conventos y monasterios y en los palacios en estos lugares se fueron organizando grupos de reflexión y enseñanza (escuela de pensamiento) la escolástica tardía y el apego de la escolástica.
4. San Angustín
(Aurelius Augustinus; Tagaste, hoy Suq Ahras, actual Argelia, 354 - Hipona, id., 430) Teólogo latino. Hijo de un pagano, Patricio, y de una cristiana, Mónica, San Agustín inició su formación en su ciudad natal y estudió retórica en Madauro.
Su primera lectura de las Escrituras le decepcionó y acentuó su desconfianza hacia una fe impuesta y no fundada en la razón. Su preocupación por el problema del mal, que lo acompañaría toda su vida, fue determinante en su adhesión al maniqueísmo. Dedicado a la difusión de esa doctrina, profesó la elocuencia en Cartago (374-383), Roma (383) y Milán (384).
Pensamiento filosófico de dicho autor: Santo Tomás de Aquino
Santo Tomás de Aquino (1224 - 1274) contemporáneo de San Buenaventura, representa el apogeo de la filosofía escolástica. Sus aportaciones al campo de la filosofía y de la teología son una brillante síntesis del pensamiento anterior, tanto de los cristianos como de los judíos y de los musulmanes, especialmente en relación con el tema de la existencia de Dios, su pensamiento es una lectura obligada de los filósofos posteriores del final de la Edad Media, de la Edad Moderna e incluso de la actualidad.
Santo Tomás aborda el tema de la existencia de Dios en varias perspectivas, desde la polémica escolástica de las relaciones entre fe y razón; Filosofía y Teología, desde la Antropología, desde la Ontología, y, naturalmente desde la Teología Natural. Su obra cumbre la Suma Teológica se ha considerado como la mejor catedral gótica del pensamiento cristiano.
En esta obra, estudia el tema de Dios desde dos puntos de vista: la teología existencial y la teología esencial. Es decir, en primer lugar se ocupa del tema de la existencia de Dios y en segundo lugar de sus propiedades o características.
Según Santo Tomás la existencia de Dios es un conocimiento natural en el ser humano, al que puede llegar con el uso adecuado y lógico de su razón, incluso sin haber conocido la Revelación cristiana, ni haber realizado un acto de fe. La razón, dirigida lógica y científicamente puede alcanzar la certeza de la existencia de Dios, e incluso de la inmortalidad y espiritualidad del alma. A estas dos afirmaciones las llama, los preámbulos de la fe. La razón precede a la fe y la filosofía a la Teología.
Sin embargo Santo Tomás rechaza el argumento ontológico de San Anselmo, según el cual, y como también afirma San Buenaventura, podemos conocer a Dios directamente a priori en el interior de nuestra conciencia.
La argumentación tomista se funda en la noción de evidencia y en la distinción metafísica entre la esencia y la existencia que había realizado con anterioridad en su opúsculo De ente et essentia (Sobre el ser y la esencia). Esta distinción, nueva en la historia de la filosofía, afirma que la esencia es el conjunto de notas o propiedades constituyentes del ser en cuestión, es decir la respuesta a la pregunta, ¿qué es?, mientras que la existencia supone la realización efectiva de la esencia en un individuo, y comienza en el momento de su aparición o nacimiento. En Dios no se da tal distinción, porque su esencia consiste en la plena existencia, en existir por sí mismo. Su existencia es eterna y es la causa de todas las demás existencias. Sin embargo a los seres humanos nos cuesta mucho formarnos el concepto de Dios, y esta es la razón por la que existen ateos, e incluso algunas personas lo conciben con forma de animal, de hombre o de fuerza de la naturaleza.
Por estos motivos Santo Tomás entiende que la proposición Dios existe, es evidente en sí misma, pero no para nosotros que somos seres limitados.
4. Santo Tomás de Aquino
No ha podido fijarse con exactitud la fecha de nacimiento de Tomás de Aquino, sin embargo es probable que su nacimiento sucediera en 1224 ó 1225. Igual problema presenta el lugar donde vio la luz, ya que distintos lugares se atribuyen dicho privilegio. Sin embargo, el lugar más aceptado es Roccasecca, un castillo situado en la cumbre de una montaña, cerca de Aquino, Italia. Su familia pertenecía a la nobleza napolitana. Hijo del Conde Landolfo de Aquino, estudió en la Abadía de Montecasino y después en la Universidad de Nápoles. En el año 1244 tomó el hábito de la Orden de Predicadores y conoció a Alberto Magno, con quien estudiaría en Colonia. Se ha dicho que muy pocos filósofos o teólogos han logrado escribir como él tanta cantidad de trabajos, de tan alta calidad, en el plazo que lo hizo Aquino, un poco menos de tres décadas.
Posteriormente se doctoró, y en 1252 ejerció como maestro de Teología en la Universidad de París, y en otras ciudades europeas como Orvieto, Roma, Viterbo, Bolonia y Nápoles. Murió el 7 de marzo de 1274, cerca de Terracina, camino del segundo concilio de Lyon. Posteriormente, el 28 de enero de 1369, los restos mortales del gran filósofo y teólogo fueron trasladados a Tolosa de Languedoc, motivo por el cual la Iglesia católica celebra su memoria en esta fecha.
Después de su muerte, algunas tesis de Tomás de Aquino fueron condenadas por el obispo de París, Étienne Tempier, quien en 1277 lanzó una gran condena de 219 tesis respecto a la Universidad de París. A pesar de esto (era una condena importante, pero local), Tomás de Aquino fue canonizado el 18 de enero de 1323. Las condenas de 1277 fueron levantadas en lo que respecta a Tomás de Aquino el 14 de febrero de 1325.
4. Las 5 vías de demostración
En la "Suma Teológica", primera parte, capítulos 2 y 3, encontramos formuladas las cinco pruebas tomistas de la demostración de la existencia de Dios, (las "cinco vías"), junto con las consideraciones precedentes, y que podemos resumir brevemente como sigue:
1. Movimiento: nos consta por los sentidos que hay seres de este mundo que se mueven; pero todo lo que se mueve es movido por otro, y como una serie infinita de causas es imposible hemos de admitir la existencia de un primer motor no movido por otro, inmóvil. Y ese primer motor inmóvil es Dios.
2. Eficiencia: nos consta la existencia de causas eficientes que no pueden ser causa de sí mismas, ya que para ello tendrían que haber existido antes de existir, lo cual es imposible. Además, tampoco podemos admitir una serie infinita de causas eficiente, por lo que tiene que existir una primera causa eficiente incausada. Y esa causa incausada es Dios.
3. Contingencia: hay seres que comienzan a existir y que perecen, es decir, que no son necesarios; si todos los seres fueran contingentes, no existiría ninguno, pero existen, por lo que deben tener su causa, pues, en un primer ser necesario , ya que una serie causal infinita de seres contingentes es imposible. Y este ser necesario es Dios.
4. Grados de perfección: observamos distintos grados de perfección en los seres de este mundo (bondad, belleza,...) Y ello implica la existencia de un modelo con respecto al cual establecemos la comparación, un ser óptimo, máximamente verdadero, un ser supremo. Y ese ser supremo es Dios.
5. Finalidad: observamos que seres inorgánicos actúan con un fin; pero al carecer de conocimiento e inteligencia sólo pueden tender a un fin si son dirigidos por un ser inteligente. Luego debe haber un ser sumamente inteligente que ordena todas las cosas naturales dirigiéndolas a su fin. Y ese ser inteligente es Dios.